viernes, 6 de enero de 2012


 MI PEQUEÑO GENIO



Publicación de la Revista Padres sobre Superdotación, por la periodista Giovanna Dioses.

Bastó que resolviera una multiplicación cuando apenas tenía 3 años para que los padres del niño egipcio Mahmud Wael, ahora de 11, decidieran que su hijo pasara por un test de inteligencia. El examen determinó que su coeficiente intelectual (Cl) es de 155, muy por encima de la media (alrededor de 100), lo que lo convierte en el chico "más inteligente del mundo". Mahmud asiste por las mañanas al colegio y el resto del día lo distribuye entre sus clases de informática en la Universidad de El Cairo y sus responsabilidades como técnico informático en Microsoft. El niño mexicano Isaac Tello (10) no tiene la misma habilidad numérica; hace poco jugó partidas simultáneas de ajedrez con treinta y dos contrincantes de distintas edades y obtuvo veintinueve triunfos, un empate y apenas dos derrotas. Jacob Barnett, un chico estadounidense de 12 años, con un Cl de 170 (superior al de Elnstein), acaba de elaborar su propia versión de la teoría de la relatividad. En el lenguaje cotidiano, los suelen llamar "niños genio"; pero estamos ante un juego de palabras que se presta a confusión. Para evitarlo, hoy en día se prefiere hablar de niños con talento. Adrián Ojeda, máster en Asesoramiento Pedagógico Familiar y director de Talentos y Talentosos, institución que trabaja con familias y centros educativos, señala los indicadores que ayudan a identificar a un niño de estas características: "Aprenden a leer y a escribir al año y medio o dos; a sumar y restar a la misma edad; su bagaje lingüístico es muy desarrollado, se podría decir que hablan como viejos. En el área de las artes, tienen el oído más fino, lo que les permite identificar notas y acordes que otros no podrían; lo mismo en la pintura, el dibujo, la escultura y en los deportes".


El coeficiente intelectual es una medida que resulta de promediar la edad cronológica y la edad mental del niño; pero valorado de manera aislada, no dice mucho. Es necesario realizar una evaluación en sus tres dimensiones, cogni-tiva, social y emocional, mediante un conjunto de pruebas psicométricas que incluyen la observación de la conducta, entrevistas con el niño, sus padres y .quizás hasta sus profesores.

Contra lo que podría pensarse, un niño talentoso suele generar reacciones encontradas en los padres: por un lado, la alegría de tener un hijo dotado; por otro, el desafío de optimizar el aprendizaje sin caer en el estrés.

¿ESTAMOS PREPARADOS?

Durante el VII Congreso Bienal de la Federación Iberoamericana del Consejo Mundial de Superdotación y Talento, realizado en Lima en el 2008, se informó que el número de superdotados en el Perú fluctúa entre el 8 y 10% de la población. Pero las políticas educativas, a diferencia de otros países, no están adaptadas para estimular el aprendizaje de estos niños. Si se opta por un colegio regular, este debe contar con programas de enriquecimiento en el área que el niño domina. Otra alternativa es la aceleración de un grado, para evitar que las estrategias educativas aburran al menor adelantado. Es importante poner énfasis en el tema social y emocional, ya que un niño con altas capacidades intelectuales puede tener dificultades para relacionarse con sus pares, dado que sus intereses son otros. Como señala la psicóloga educativa Mariana Batticani: "La función de la escuela es también esa: la socialización del niño y su inserción en la comunidad"

viernes, 22 de julio de 2011

El Niño Genio

Entrevista de perodista Givanna Dioses a Adrián Ojeda para la revista PADRES

Podríamos hablar de lo que usualmente algunos autores determinan con respecto a esta denominación, por ejemplo al “niño genio” lo llaman como precocidad en la manifestación de alguna capacidad en especial; se llama “superdotado” a la persona, que sin interesar su edad, muestra un desarrollo muy superior sobre el nivel normal en algún área del desenvolvimiento humano; y otros mencionan como “talento” a la persona que sobresale de manera brillante en alguna actividad sin llegar a la superdotación.



¿A quiénes se les denomina niños genio? .

La denominación es bastante compleja, no existe un consenso mundial definido sobre el tema, varía mucho de acuerdo a las regiones y países, es tanto así, que los centros de investigación más adelantados producen materiales de evaluación que luego se tendrán que validar en los distintos países de acuerdo a su realidad, variando los ítems de los instrumentos y cambiando así las nomenclaturas.
 
¿Es lo mismo niño genio, superdotado y talentoso?

En Talentos y Talentosos, hemos llegado a un consenso, para poder ayudar a las personas que presenten alguna de estas características, a sus familiares y a los centros donde estudian y/o trabajan.
El Talento existe dentro de todos los seres humanos, todos nacemos con uno o más. Las áreas del Talento pueden clasificarse en cuatro: Talentos intelectuales, Talentos Artísticos, Talentos Físicos o Deportivos y Talentos Sociales. Los niveles en los que se presenta son: normal, superior y en superdotación.


¿Quiénes, por ejemplo, tienen esa capacidad memorística para almacenar datos, información, se les puede llamar genios?

Volvemos al tema de la denominación, las personas que presentan una extraordinaria capacidad para recordar los datos e información almacenada en el cerebro, usualmente utilizan otras áreas del cerebro para realizar este proceso y además los “filtros” para usar esa información actúan de manera distinta a la de una persona normal. El olvido es una capacidad humana que es manejada por dichos “filtros”.
Estas personas Presentan un Talento en nivel de superdotación en el área intelectual y de manera específica en la memoria.

¿Cómo pueden saber los padres que tienen un niño genio?

La manifestación del talento es muy caprichosa, no tiene una regla fija ni una edad específica. Pero si hay indicadores que nos alertan de un talento precoz y en cualquiera de los tres niveles, el normal, el superior y el de superdotación. Por ejemplo, una muestra del talento intelectual es la precocidad al aprender a leer y a escribir, que puede ser al año y medio a dos; a sumar y restar a la misma edad; el bagaje lingüístico muy desarrollado, como cuando nuestro hijo de dos a tres años “habla como viejo” estructurando ideas perfectamente y con una gramática extraordinaria. En el área de las artes es más visible, ya sea que muestre un ritmo acompasado al escuchar música, definitivamente tiene el “oído más desarrollado” que le permite identificar notas y acordes que uno “normal” no alcanzaría a hacerlo. De igual forma en la pintura, el dibujo, la escultura y las demás manifestaciones artísticas. En el deporte es también evidente.

¿Los niños talento, tienen algúna dificultad?

Dentro de las variables en el comportamiento de los niños que presentan niveles superiores y de superdotación, en cualquiera de las cuatro áreas antes nombradas, y en especial en la intelectual, se manifiestan niveles bajos o muy bajos en otras áreas distintas a la del talento, creándole severos problemas en especial en la comunicación, autoestima o sociabilidad por poner algunos ejemplos. Lo más peligroso de esta situación es que los llamados a entender y a ayudar a un niño con estas características, que somos los padres y maestros ignoramos cómo hacerlo y en la mayoría de los casos terminamos ahondando la problemática y hundiendo a un “genio”. En Talentos y Talentosos, colaboramos con la familia y el entorno educativo para ayudar a desarrollar el talento y a nivelar las áreas deficitarias, realizando un trabajo en conjunto y de manera inclusiva.


Documental sobre situación de niños con talento superior y en superdotación.



¿Cómo suelen ser estos niños en su forma de relacionarse con los demás?

El niño que presente niveles superiores o de superdotación siempre va ir acompañado de algún desnivel en alguna de las otras áreas y en especial en el de la comunicación. Al tener áreas del cerebro muy desarrolladas, pareciera que hubiera otras que se inhibieran probablemente gracias a esos “filtros” que le permiten concentrarse en el desarrollo del talento. Por lo tanto muchos de estos niños muestran problemas de comunicación e interrelación con su medio, llegando a presentar el síndrome de Asperger que antiguamente se le veía como un nivel del autismo y que en la actualidad se sabe que este síndrome está acompañado por la presencia de superdotación en algún área, especialmente la intelectual.

 
Usualmente los niños que presentan niveles de superdotación en algún área, también se caracterizan por desarrollar esa área específica, por ejemplo un niño que presenta el talento intelectual en el área de la lógica matemática y su estilo de aprendizaje sea visual y auditivo va a desarrollar actividades que tengan que ver con sus intereses de manera muy fluida pero presentará dificultades y hasta renuencia por ejecutar actividades que sean muy distintas a las que su diseño cerebral le permita aceptar. En este caso su capacidad de socializar es muy limitada y en ocasiones nula.

El entorno en la mayoría de los casos no ayuda a que el niño socialice o empiece a comunicar su mundo interior, por el contrario los padres se asustan y quieren obligar al niño a desarrollar vínculos amicales, presionándolo y generando rechazo en ellos. Los compañeros de aula e inclusive los profesores, al no conocer cómo tratar a este tipo de personalidad, hostigan al niño de tal manera que lo “arrinconan como algo raro”. El resultado de su sociabilidad es evidente, se vuelve antisocial, presenta baja autoestima, depresión, ensimismamiento y en la mayoría de los casos el niño empieza a bloquear su talento o el desarrollo de este. En Talentos y Talentosos trabajamos con la familia y el colegio para ayudar al niño talento en nivel de superdotación a insertarse en su entorno de manera asertiva, al igual que estimular el área de comunicación y el desarrollo de su personalidad. Este es un trabajo en conjunto.

 

¿La inteligencia se hereda o se desarrolla?

 

El desarrollo de la inteligencia es como un programa que tenemos instalado en nuestro disco duro, para hacer una comparación con la informática, este programa corre automáticamente cuando el medio estimula las células cerebrales produciendo que estas se conecten entre ellas formando redes. Mientras más conexiones y redes se formen, mayor será el desarrollo de la inteligencia. Esta estimulación se da a través de los sentidos.

La herencia tiene mucho que ver para el desarrollo de la inteligencia, ya que a través de los genes heredados un niño puede presentar una predisposición muy grande para el proceso de estas conexiones neuronales, por lo tanto su capacidad intelectual tiene un potencial muy grande.

Como todos los seres humanos tenemos ese programa de desarrollo de la inteligencia dentro de nosotros, todo depende de la estimulación, de su calidad y de su adecuación. Mientras mayor sea la estimulación, los resultados serán óptimos, tanto en los niños que presentan superdotación como los que presentan el talento en niveles normales, necesitan de la estimulación y de lo adecuado del entorno familiar y escolar. La idea no es solo llenar de información la cabecita de los niños, que es lo que plantean actualmente muchos sistemas educativos, sino de desarrollar las áreas intelectuales en su conjunto y potencializar las áreas talentosas, de tal manera que la información adquirida por el niño fluya de tal manera que la inteligencia le ayude a crear, recrear y producir cosas, nuevas, soluciones a sus necesidades e inventar mejoras en su calidad de vida y de su medio.
En Talentos y Talentosos ayudamos a realizar el desarrollo de la inteligencia de los niños en todos sus niveles, especialmente el superior y de superdotación. Pero el tema no queda allí, es muy importante desarrollar a la par la personalidad y la inteligencia emocional del niño para que pueda manejar ese talento en el nivel que sea, sin esta característica el desarrollo de su inteligencia le generará más problemas que soluciones y por lo tanto afectará a su entorno familiar y social de manera negativa.

En el caso de la genialidad… ¿esto es hereditario? ¿Cómo así se vuelven genios?

Para el desarrollo de la genialidad o la aparición del talento en los niveles superiores y de superdotación no existe ley definida, hay talentos que se heredan, los saltos genéticos nos muestran que genes dominantes y recesivos, los primeros son los que se manifiestan, al igual que el color de los ojos o el cabello o los otros rasgos físicos, en el talento sucede lo mismo si está relacionado con la herencia porque hay registro de talentos en la familia. En el caso de “Formar genios” pues sucede que existiendo una predisposición natural y mediante un proceso de desarrollo del área talentosa y de la personalidad se logra. Y también existen los “Genios” que se aparecen como consecuencia de un momento fuerte en su vida, como un accidente donde se golpearon la cabeza, o una situación impactante que produjo un shock, o cualquier otra situación que alteró sus condiciones cerebrales.


¿Puede un niño potenciando su inteligencia llegar a ser un genio?


Mejor aún, podemos utilizar el talento para desarrollar toda su personalidad. Existen dos condiciones para desarrollar el talento, estas son: primero ubicar el talento y el nivel en que se encuentra y segundo que el niño o adolescente “quiera” desarrollar sus capacidades.
 


Hay papás que presionan a sus hijos para que sean dotados ¿de qué manera esto les afecta?

Esto sucede muy a menudo, con el hijo que presenta indicios de un talento en cualquier área, en especial en los niveles superiores. El padre o la madre queriendo el bien de su niño talento, pero sin orientación alguna, presionan de tal manera para que desarrolle el talento que terminan dañando la personalidad de su hijo y/o bloqueando al talento. El desarrollo del Talento en cualquiera de sus niveles debe estar acompañado por un guía y el trabajo en conjunto, padres, centro educativo y el niño talento. Esa es la labor que realizamos en Talentos y Talentosos.

¿Cómo suelen ser los padres de estos niños? Leí, por ejemplo, que los papas tienden a ser cálidos y sensibles. Razonan, apelan a los sentimientos antes que aplicar reglas rígidas. ¿Esto es así?

Las reacciones son distintas, desde el miedo por no saber tratar a un hijo que no es como los demás, y que tiendan a pensar que es “raro”, hasta los sobreprotectores que porque el hijo no sufra, lo aíslan y prodigan de todos sus afectos, impidiendo que este niño crezca normalmente de acuerdo con su talento.
Los niños que presentan superdotación o niveles superiores en cualquiera de las áreas, suelen mostrar frecuentemente una personalidad impulsiva, con poca tolerancia a la frustración, y de fácil irritación o por todo lo contrario una personalidad ensimismada, tímida y dependiente. Muchas veces la reacción de los padres les hace perder la autoridad por la falta de recursos que le permitan formar y educar al niño talento de manera adecuada.
No todas la “recetas” funcionan con todos, hay que involucrarse en el trabajo en conjunto, teniendo muy en cuenta el perfil psicológico y la personalidad del niño talento.

 
 
¿Un padre con un niño genio qué debe hacer, cómo debe actuar o apoyarlo, a dónde debe recurrir o no necesita ayuda?
Una recomendación para los padres, tener un hijo que presenta niveles superiores o superdotación en algún área, es un don del que tenemos que cuidar y ayudarlo a desarrollar. Acercarse a los profesionales que nos ayuden a lograrlo, es lo indicado.


En su opinión, ¿los niños genios deberían estudiar separados de los demás niños o es recomendable darles un tratamiento especial dentro de la escuela?

Existe en la actualidad una corriente educativa que se llama inclusiva, que tiene que ver con que los niños con alguna necesidad educativa especial, como es el caso de los niños talento en los niveles de superdotación y superiores, estudien en centros educativos para niños que están dentro del rango promedio. Me parece interesante, ya que se pide que los niños con necesidades educativas especiales tengan una preparación previa y una ayuda durante su inclusión. La dificultad que se observa es que no existen los suficientes centros que se dediquen a preparar a los niños talento además que los maestros no están capacitados adecuadamente para ayudar al desarrollo del talento y la personalidad de este tipo de niños.


El hecho de que estos niños, por ejemplo, por su alto coeficiente intelectual, asistan a la universidad siendo muy jóvenes no es malo en el sentido de que no viven su niñez como un niño cualquiera, sino que viven aceleradamente las etapas de la vida.

Recordemos que un niño Talento que ingresa a la universidad a muy temprana edad, es gracias a que su nivel intelectual le permite estar de igual a igual  con jóvenes de 21 a 25 o más. Pero su inteligencia emocional y su desarrollo físico es la de un niño. Él necesita aprender a manejar este peculiar desbalance y a madurar su personalidad de manera paulatina y con ayuda profesional. En talentos y Talentosos realizamos esta labor.
Es muy frecuente encontrar un elemento común en estos niños, no solo los que se ya están en la universidad, sino también en el área artística, los jóvenes cantantes y/o actores súper estrellas, este elemento es la frustración. Esta frustración se presenta porque no han madurado y ya tienen responsabilidades que van más allá de su capacidad generando en ellos una presión interna de la quieren escapar, es por eso que vemos jóvenes adictos a distintos tipos de drogas o alcohol y que entran y salen de entidades para desintoxicación. Ellos encuentran erróneamente en estos elementos una válvula de escape a la presión generada por el desbalance producido por el talento. Esto en caso de no trabajar adecuadamente el desarrollo del talento.


Sobre el Test de Coeficiencia Intelectual:
¿En qué casos se toma el Test de Coeficiencia Intelectual?

En la actualidad los Test de CI son referenciales, antiguamente en sus inicios era la única herramienta para determinar los niveles de inteligencia, que se limitaban a algunas áreas solamente. En la actualidad con el descubrimiento de la inteligencias múltiples, la inteligencia emocional, los estilos de aprendizaje, el diseño cerebral, los procesos del pensamiento, las neurociencias, el perfil de personalidad, etc. son algunas de las herramientas que nos ayudan a determinar el área del Talento y su nivel.
Una de las herramientas más utilizadas para medir la inteligencia es la Escala de Inteligencia de Wechsler, que puede medir a niños desde 2 años 6 meses.

¿Qué información arrojan estos test?

De a cuerdo a la edad tienen tres grupos para niños menores, para niños en edad escolar y para adultos.

¿Cómo deben ser entendidos o leídos estas pruebas?

Las pruebas son interpretadas por los psicólogos y arrojan una medición en las áreas lógico, matemático, lenguaje, interpretación, bagaje lingüístico, etc de acuerdo con la edad cronológica. Un niño normal presentará un edad intelectual al mismo nivel que la edad cronológica. Una niño en nivel superior o superdotación presentará la edad intelectual (En algún área específica) sobre la edad cronológica.

¿Son 100% confiables?

Si son confiables y validadas bajo estrictas medidas, pero tengamos en cuenta que este tipo de herramientas solas no nos sirven de mucho para poder trabajar el talento, se necesitan complementar con otros tipos de evaluaciones y pruebas para lograr el óptimo desarrollodel Talento.

¿Por qué es necesaria la formación integral del niño que presenta un talento?

El talento puede fluir después de ser estimulado, de dos maneras una, como un rio, que tiene energía, que alimenta y nutre, que genera belleza, que sirve de medio de comunicación, que brinda un sin número de bondades y dos como un huayco o avalancha, que tiene la misma energía pero que destruye. El primero está encausado, ordenado, igual que el talento que es desarrollado junto a una formación integral de la personalidad del niño. Y el segundo muestra cómo el mismo talento puede destruir si no se forma, puede inclusive llegar a aniquilar la personalidad de la persona. Tenemos en nuestra sociedad un sinnúmero de tristes ejemplos, en especial en el deporte, el fútbol, que presenta niños talento que al llegar a la adolescencia pierden su futuro exitoso por no saber manejar su personalidad ni su talento.

sábado, 23 de enero de 2010

CÓMO TENER EXITO CON LOS HIJOS

Joaquín, un ingeniero ya mayor, me hablaba de sus hijos, y se llenaba la boca con expresiones de alegría y felicidad, mientras cruzaba miradas con su esposa al referirse a los logros que obtenían unos en el extranjero y otros dentro del país, todos profesionales. Me llamó la atención una frase que repetían ambos constantemente: “Y son felices en el matrimonio”.
En primer lugar hay que definir qué se considera tener éxito en esta vida. Tener éxito es haber alcanzado la calidad de vida que nos permita ir obteniendo nuestras metas y objetivos. Esta situación nos traerá como consecuencia una mayor cantidad de momentos felices, agradables y placenteros, que a su vez nos ayudará a ver positivamente nuestro futuro. El éxito no es la meta, es una condición de vida, un estado, es la actitud con la que vivimos. Tener éxito con los hijos, es transmitirles esta actitud, es contagiarles el modo positivo de ver la vida, es prepararlos para triunfar, esto les permitirá ir creciendo de manera exitosa.
Atención, el triunfo y el éxito no significa necesariamente la abundancia de dinero o riquezas, la bonanza económica tiene que ser consecuencia de hacer bien un trabajo, enseñar a nuestros hijos a realizar bien lo que hagan es parte del éxito. Si les enseñamos que el dinero es la meta o les comentamos que el dinero lo hará feliz, les estamos sembrando una gran mentira que los hará infelices por el resto de la vida.


DE GUATEMALA A GUATEPEOR

Esta frase grafica fielmente lo que nos está sucediendo con el tema de nuestros hijos. Probablemente tú seas de aquellos cuyos padres fueron estrictos y drásticos, entonces dijiste: “Cuando tenga mis hijos no voy a ser así”. Maritza se quejaba entre lágrimas, de la reacción de sus hijos, ya jóvenes y adolescentes, que le daban un trato muy osco, el tono de voz elevado y en algunos momentos insolente, llegando a faltarle el respeto en más de una ocasión. Ellos eran los que mandaban en casa, y si no se hacía lo que ellos querían, se armaban unos líos espantosos. Argumentaba que no entendía esta situación, ya que ella les había dado de todo, para que nada les falte y si querían algo lo tenían al instante, nunca les negó nada. Ella se había preocupado en cuidar que no hicieran nada más que estudiar, nada más. ¿Qué hizo mal? Lo que nos ha sucedido es que hemos invertido los valores, se nos ha volteado la tortilla; es así como la autoridad en la familia, se la hemos delegado a los hijos, por amor, en ese afán de caerles bien y ser su “pata”, en muchos de los casos son niños o niñas de menos de tres años que al paso del tiempo se van convirtiendo en unos tiranos, y cuando reaccionamos ya es demasiado tarde. Ya adultos, se las verán muy mal con la vida, ya que parte del fracaso es el engreimiento y el egoísmo, estos elementos ni lo harán feliz, ni lo ayudarán a triunfar.


NADIE NOS ENSEÑÓ

Las penas, las angustias, los miedos, los resentimientos y los problemas que vivimos, nos los han sembrado nuestros padres, tutores y/o maestros a lo largo de nuestra vida, especialmente en la infancia y adolescencia. ¿Pero, lo han hecho por malos? ¿Lo han hecho a propósito? ¡No! Les ha sucedido esto por pura y completa ignorancia. Nadie les enseñó a ser padres, ni a ser esposos. Y para completarla, esta historia se repite con nosotros. Lo peligroso de esta situación es que podemos continuar esta cadena con nuestros hijos, o ya lo estamos haciendo y no nos damos cuenta. Ya es hora de cambiar esta realidad, y la única manera es cortando la cadena con el conocimiento, tenemos que aprender a ser padres y esposos. No importa la edad que tengamos, ya que el hombre por naturaleza es perfectible, en otras palabras puede mejorar.


LAS LEYES DE LA VIDA

La naturaleza entera obedece leyes para su funcionamiento. Las piedras que no tienen vida, las plantas que no tienen movilidad propia, los animales que no tienen voluntad e inteligencia racional, todos obedecen leyes. El ser humano que tiene libertad, inteligencia desarrollada, voluntad propia, es el único que no obedece leyes. Porque no las conoce, en la mayoría de los casos; y en el resto, porque no quieren; su humanidad se está distorsionando y se rebela contra el orden natural.
Todos los juegos creados por el hombre, tienen reglas. Por ejemplo el ajedrez, tiene sus reglas y gana el juego el que las conoce todas y bien, además de practicarlas constantemente. La vida es como el juego, gana, triunfa el que conoce y practica sus leyes. Quieres un hijo triunfador, enséñale las reglas de la vida y que las practique.



PREPARAR TRIUNFADORES

Nuestra misión es formar seres humanos triunfadores y la manera más adecuada es preparándonos y haciendo una reingeniería en nosotros mismos, ya que en nuestra naturaleza está mejorar. El hombre ha sido diseñado para triunfar y ser exitoso en la vida, las mentiras que crecen en él son lo único que puede tumbarlo y alejarlo de su destino.
En Talentos y Talentosos ayudamos a las familias a conseguir este objetivo. Si desean conocer más sobre este tema visítenos.



Adrián Ojeda Flores aojeda@talentosytalentosos.org



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viernes, 22 de enero de 2010

LAS LEYES DE LA VIDA



Claudio es un muchacho de 16 años, que ha pasado su época escolar con tranquilidad, ya que es un estudiante aplicado. Él quiere seguir arquitectura y su padre para apoyarlo lo llevó a visitar a un amigo que tiene una constructora y le converse sobre la carrera. La reunión no pudo ser más “constructiva”. El amigo resumió en tres palabras lo que un constructor requiere de un arquitecto: CREATIVIDAD, para poder hacer “magia” con el diseño; PUNTUALIDAD, en los plazos fijados de entrega; PROACTIVIDAD, para identificarse con el proyecto y la empresa y así poder dar más de lo que le pide. Estas fueron las tres pautas que marcarán la vida profesional de Claudio. Creatividad, puntualidad y proactividad son habilidades, capacidades y valores que no solo los arquitectos deben cultivar en sí mismos para tener éxito en su profesión, sino son algunas de las pautas que todo ser humano debe desarrollar para triunfar en la vida.
Es así como funciona todo, no hay nada que sea al azar, todo tiene un diseño para que pueda trabajar en función de lo que ha sido creado.
Recuerdo muy claramente el caso de un pediatra, que recomendaba a una madre cuyo hijo pequeño era muy problemático para la comida, ya que a sus horas no comía nada y eran peleas campales el conseguir que se alimentara. El buen doctor le decía que no había que hacerse problemas, que el niño comiera cuando le diese las ganas de hacerlo y que no lo obligaran. Pues bien, el resultado fue una aguda anemia por desnutrición. Nuestro organismo está diseñado bajo determinadas reglas de funcionamiento “organizado”, sino no se llamaría organismo. Y dentro de esas pautas o reglas, necesita alimentarse consecutivamente a determinadas horas, porque para su buen funcionamiento debe ser ordenado con los tiempos. Orden, un valor, que ayuda a vivir y a vivir bien, estamos diseñados para vivir con orden.

LOS VALORES

Repetiré nuevamente, la vida tiene sus leyes, sus reglas, y triunfará aquel que las conozca y las practique. Un Gran componente del triunfo y el éxito en la vida es la participación de los valores, porque estos permiten que nuestro adecuado desenvolvimiento en la vida se realice de manera fluida y enriquecida de tal manera que no solo nos realicemos como seres humanos, sino que podamos ver más allá de nuestra propia naturaleza. Los valores son el componente que nos permite ser seres humanos y actuar como tales. En otras palabras los valores hacen posible que la aplicación de las leyes de la vida y su práctica sea más fácil y acertada. El hombre que vive de acuerdo a los valores logra alcanzar una extraordinaria calidad de vida.
Los valores están fuera de nosotros, y es necesario que los hagamos nuestros pues tenemos esa capacidad. El problema radica en que no todos poseemos la misma capacidad de percibir la existencia de los valores, ya que nuestra inteligencia, nuestras pasiones y emociones suelen jugarnos malas pasadas y distorsionan o bloquean la apreciación de los mismos. La solución está en ejercitar y perfeccionar dicha capacidad y si es desde más pequeños mejor, porque mientras se adquieran a la edad adecuada, los valores funcionarán perfectamente. Por ejemplo, siguiendo con el orden, la mejor edad (periodo sensitivo) para adquirirlo es entre los dos y tres años, podemos hacerlo de manera lúdica, jugando con nuestros hijos o alumnos, por ejemplo a ordenar los juguetes después de jugar, al “jugar” a colocar la ropa que ha usado en la cesta de ropa sucia, etc. Por supuesto que este tipo de actitudes las tienen que realizar los padres, porque parte importante del aprendizaje es el ejemplo.
Todos los valores tienen su contraparte que son los desvalores, en otras palabras, los valores pueden tener una valencia positiva o negativa. En el ejemplo del orden, vendría ser el desorden. Lo curioso de esto es que si bien los valores nos ayudan a poder percibir y disfrutar lo bueno de la vida, en todos los sentidos; los desvalores nos inducen a desarrollar acciones erráticas, equivocadas, ya que la influencia sobre la inteligencia es tan fuerte que no puede percibir la realidad en su verdadera dimensión, en consecuencia la vida de alguien que ha dejado que los desvalores hagan nido en su vida, difícilmente verá el logro y el éxito, porque simplemente no está en capacidad de hacerlo.
Los seres humanos se asemejan a un balde o una cubeta, esta está llenos de agua o aire y siempre va a contener uno de los dos. Podemos utilizar esta comparación con el bien y el mal, con los valores y los desvalores; y el hombre como la cubeta, estará lleno de uno de los dos. En el caso de tus hijos ¿De qué quieres que esté lleno? , porque eres tú padre de familia o tutor, quien está llenando a ese ser del bien o el mal y determinando cómo y quién será más adelante un triunfador o fracasado en la vida. No podemos permitir que sean otros los que con distintas intenciones forjen su futuro.
Para poder realizar esta labor de formar hijos triunfadores y exitosos debemos hacer nuestro ese conocimiento que nos permitirá mejorar primero nosotros mismos y producir un efecto multiplicador en nuestros hijos. En Talentos y Talentosos, estamos dispuestos y preparados para ayudarles con esta labor.

Adrián Ojeda Flores aojeda@talentosytalentosos.org
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domingo, 23 de agosto de 2009

¿Cómo se si mi hijo tiene un TALENTO?

¿Cómo se si mi hijo tiene talento?

Esta es la pregunta que me hizo Margarita, mamá de Estephany que tiene 5 años, “...habla muy bien, es conversadora y se conoce todas las canciones de Shaquira, las baila y se pone a imitarla, en los cumpleaños es la primera que participa, creo que va ser una estrella.” ¿Y Stephany es obediente? – le pregunté. Bueno, tiene sus momentos – me contestó- en realidad no obedece muy seguido, siempre hace lo que quiere, eso es tener personalidad ¿no? ... en el kínder ya se me han dicho que le cuesta obedecer...
Es muy probable que Estephany tenga un talento social y a la vez esté desarrollada su área verbal, esto más su creatividad pueden ayudarle para convertirse en una artista, ya sea del canto, la música, la actuación, la comunicación, etc. Como vemos tiene un amplio panorama para triunfar y tener éxito en su vida futura.

¿Cómo se desarrolla el talento?

En el caso de Estephany es un esquema similar para todas las áreas y formas de talento. Ya hemos comentado que dichas capacidades pertenecen a distintas áreas, o la combinación de estas, y pueden ser: intelectuales, artísticas, deportivas y sociales. Y estos talentos se han de presentar en distinta graduación; baja, normal, superior o las posibles combinaciones de estas. La única manera de desarrollar el talento de Esthephany es la estimulación positiva y el enriquecimiento de sus capacidades, en otras palabras es apoyarla y motivarla en casa, de manera adecuada y hacer participar al centro educativo de esta labor. De esta forma triangulamos el trabajo. Pero para poder estimular adecuadamente a Esthephany hay que conocer sus aéreas altas y bajas mediante una evaluación al igual que su dominancia cerebral que nos permite conocer cuál es su forma de aprender y ver la vida, luego se elabora un plan de desarrollo de sus capacidades en TALENTOS Y TALENTOSOS y las orientaciones necesarias a los padres y al centro educativo para conseguir los objetivos de manera exitosa.

¿Cómo participa la familia?

Lo primero que tienen que hacer los padres de Estephany es hacerla evaluar para identificar las áreas anteriormente explicadas y poder desarrollar las pautas dentro de la familia, porque padres, hermanos, tíos, primos, etc. participan. Por ejemplo, el comportamiento de Estephany es poco acertado en el hábito de la obediencia. Si desarrollamos sus talentos sociales y artísticos y crece sin autoridad positiva, mas adelante padecerá de inseguridad y pensará que es el centro del mundo, volviéndose engreída, egoísta y ególatra, situaciones que la llevaran a la autodestrucción y la infelicidad de ella misma y los seres que mas quiera, incluida la familia. En este supuesto el talento no funcionó para Estephany. ¿Cuántos talentos se han perdido o frustrado por causa de los padres...? Entonces debemos prepararnos para formar hijos triunfadores. A nosotros no nos enseñaron a ser padres ni esposos, lo aprendimos en el camino y cometiendo errores, ya es hora de cambiar esta situación, en TALENTOS Y TALENTOSOS los ayudamos a mejorar y crecer como padres.

¿Cómo participa el centro educativo?

Estephany pasa la mayor parte de la vida consiente en el centro educativo, y es el lugar perfecto para estimular las áreas talentosas y las que no lo son, de esta manera se cierra el círculo para desarrollar el talento. TALENTOS Y TALENTOSOS coordina y da pautas a los centros ayudando a enriquecer las actividades programadas, dirigidas de acuerdo a las necesidades y capacidades de Estephany, de esta manera los resultados son extraordinarios...

ADRIÁN OJEDA
TALENTOS Y TALENTOSOS
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Texto publicado en MOLINEWS - Setiembre.